domingo, 7 de enero de 2007

LA INFORMACIÓN CON LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS Y LA WEB 2.0

Ya di cuenta en el post del día 1 de la morbosa difusión del vídeo con el ahorcamiento de Sadam Husein. En El País de hoy se da cuenta de su repercusión mediática, extendiéndose el autor de la información en una interesante reflexión sobre la información y el periodismo con las potencialidades de las nuevas tecnologías y la Web 2.0.

He encontrado en YouTube, cómo no, el famoso vídeo d 1991 con el apaleamiento de Rodney King, importante antecedente de lo que se comenta en la información.

Esta información completa el artículo de Moisés Naím
que ya recogí aquí en el post El efecto YouTube.





EL CADÁVER DE SADAM HUSEIN SIGUE

DANDO GUERRA

Una ejecución de aire medieval se ha difundido sin límites por Internet.

Sólo en Google ha sido vista 14 millones de veces.


Andréa Rizzi. Madrid

El País 07/01/2007


(INFORMACIÓN ABREVIADA)

(los ladillos y la negrita son propios)


El vídeo del ahorcamiento de Saddam Husein, grabado aparentemente con un móvil y colgado en la Red el pasado 30 de diciembre, había sido visto hasta ayer unas 14 millones de veces sólo en Google. Calcular con exactitud cuanta gente en total ha visto el macabro filme de dos minutos y 36 segundos es prácticamente imposible, teniendo en cuenta las infinitas posibilidades de acceso ofrecidas por páginas como Youtube, toda clase de motores de búsqueda, medios, blogs y foros en Internet; y por la opción de transmitirlo y verlo vía móvil. La cifra de Google permite hacerse una idea de las magnitudes y de la guerra que el cadáver de Sadam Husein puede dar todavía en el escenario internacional.



Ya hay 1.100 millones de usuariosde la Red

y 2.200 millones de teléfonos móviles



Pero la difusión masiva de esta noticia también pone el acento sobre la enorme potencialidad de las tecnologías disponibles: cámaras en teléfonos móviles y posibilidades inmediatas de conexión a Internet.

Hay 2.200 millones de teléfonos GSM y 3G activos en el mundo; 1.100 millones de usuarios de Internet; y una industria video-fotográfica que no para de sacar modelos de todo tipo de tamaño y coste. Dicho de otra forma: hay potenciales reporteros digitales por todas partes. Ningún obstáculo para la publicación, gracias a la Red, a Google, Youtube, etc. Y una audiencia potencial inmensa. Incluso un país devastado como Irak cuenta con 4,6 millones de conexiones telefónicas fijas o móviles, sobre una población de 26,5 millones.


El vídeo que en 1992 documentó el apaleamiento de la policía de Los Ángeles al ciudadano negro Rodney King.





"Disponemos gracias a esas tecnologías de un enorme observatorio sobre la sociedad", reflexiona en una entrevista telefónica Jean-Pierre Elkabbach, periodista de referencia en Francia y presidente de la emisora Europe 1. "Una oportunidad fantástica, pero también un riesgo importante. En la Red, prácticamente, no hay filtros. Todo puede colarse -contenidos manipulados, de propaganda, que violan la privacidad o la dignidad humana- y alcanzar directamente al usuario".


"Todo puede colarse
-contenidos manipulados, de propaganda,
que violan la privacidad o la dignidad humana-
y alcanzar directamente al usuario"



"Estas tecnologías enriquecen el debate, pero han cambiado radicalmente el papel de los periodistas", observa desde EE UU Bill Kovach, ex periodista de The New York Times, y fundador del Comittee of Concerned Journalists, una organización que agrupa unos 7.000 periodistas de todo el mundo. "El nuevo escenario exige que nos convirtamos en fiables autentificadores. Tenemos que aprender a detectar en el océano de contenidos las mentiras o las manipulaciones que las nuevas tecnologías permiten. Ya no se trata de ser los primeros en dar una noticia. Se trata ser fiables filtradores".

¿Cuáles eran las intenciones de quienes grabaron la ejecución de Saddam? ¿Alimentar el odio de una facción? ¿Satisfacer la sed de venganza de otra? Lo único cierto de momento es que, cualquiera fuesen las intenciones, la piedra lanzada en el estanque está produciendo, gracias a las nuevas tecnologías, grandes olas. Las consecuencias del periodismo no convencional pueden ser devastadoras.

El vídeo que documentó las injustificadas violencias de la policía de Los Ángeles en contra del ciudadano negro Rodney King desencadenó en 1992 tres días de protestas, caos y masiva rebelión en la ciudad californiana.

"En ese caso, la difusión del vídeo dependía todavía de los medios convencionales, que tuvieron la posibilidad de contrastar la veracidad del material antes de publicarlo", dice al teléfono desde Nueva York Michael Silberman, presidente de la Online News Association, una organización en cuya directiva figuran profesionales de The Washington Post, The International Herald Tribune y Yahoo!News, entre otros. La revuelta de Los Ángeles tenía motivaciones objetivas. "Ahora, el control puede ser sólo después de la difusión. Y, mientras se realiza, el daño puede ya haberse producido". El odio puede haberse desencadenado ya, la privacidad violada, la reputación manchada, con un alcance cada vez mayor.



"Ahora, el control puede ser sólo
después de la difusión.
Y, mientras se realiza,
el daño puede ya haberse producido"



Alcance aprovechado por los partidos políticos de medio mundo, que cuelgan en la Red vídeos de propaganda, muy parecidos en la forma a reportajes, que llegan íntegros a la audiencia, sin tener que pasar por el filtro de los medios convencionales; o, como señala Elkabbach, por las empresas, que pagan a autores de blogs populares para hacerse publicidad. En fin, peligros por todas partes.



¿qué hubiese pasado en la Alemania nazi
si alguien hubiese grabado y publicado
lo que pasaba en los campos de concentración?



Pero también: "¿Qué hubiese pasado en Bosnia si alguien hubiese podido documentar lo que pasaba con una mini cámara o un móvil?", pregunta Silberman. O: ¿qué hubiese pasado en la Alemania nazi si alguien hubiese grabado y publicado lo que pasaba en los campos de concentración? "La posibilidad de denunciar crímenes y atrocidades aumenta enormemente y puede contribuir a detenerlos. Es un gran activo. La libertad de expresión aumenta, y con ella la capacidad de control sobre los poderes... el resultado neto entre riesgos y ventajas es positivo". Y, en fin, en la Red hay bueno y malo al igual que fuera. "Y al igual que para los medios convencionales, la gente utilizará su espíritu crítico para decidir de quiénes fiarse o no", observa Milverton Wallace, profesor del University College de Londres.

Y además, "las nuevas tecnologías permiten a escala global eludir la prepotencia de las fuentes, que dictan la agenda y fabrican la información", dice Fernando González Urbaneja, presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España.





2 comentarios:

  1. La trascendencia que tiene cualquier información actualmente es impresionante. Los canales por los que se mueve lo que llamamos Web 2.0 hace que esta repercusión sea global en pocos instantes, aunque todavía hay quien quiere poner cadenas al campo, véase la noticia del bloqueo de Yotube en Brasil.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Luis. Leí también esa información. Lo que me gustó de esta información de El País es precisamente cómo sopesa los riesgos y ventajas de algo que va a más de manera acelerada.

    ResponderEliminar