miércoles, 17 de enero de 2007

"BANDERAS DE NUESTROS PADRES". La creación de un icono patriótico


"Con la foto adecuada puedes ganar o perder una guerra (...)
Con esta imagen la gente se puso como loca.
El país estaba harto de la guerra.
Y una foto por sí sola cambió todo eso"
(del trailer de la la película)


Mágnífico tema, el de la historia de una fotografía de prensa de una importante batalla de la II Guerra Mundial, para iniciar en COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL un tipo de post dedicados a informaciones y comentarios sobre películas de actualidad que podemos ver en los cines o mediante otros procedimientos.

"Banderas de nuesros padres" no es la mejor película de Clint Eastwood, pero es suya, con su estilo y sus preocupaciones estéticas e ideológicas. Muy recomendable, por lo tanto.

Y más si estás interesado en la utilización política o ideológica de las imágenes de prensa, tema tan querido en este blog. La película se centra, precisamente, en la historia de la famosa fotografía que tiener arriba, conocida como "los héroes de Iwo Jima", en la que los marines plantaban la bandera en lo alto del monte Suribachi de la isla.

Puedes encontrar en la web muchas críticas y análisis. Te recomiendo las de La Butaca, la de El Diario Montañes o ésta de La Guía del Ocio.


Las estrellas de La Guía del Ocio son muy interesantes como indicativo general respecto a otros títulos del momento.


A continuación tienes el trailer oficial de la película:




He encontrado también un vídeo de 4 minutos de Canal + con uno de mis críticos favoritos, Carlos Boyero y la no menos sabia María Guerra, antigua colaboradora de "El cine de lo que yo te diga" de la Cadena Ser.




Quedamos a la espera de la historia desde el otro lado, el de los tenaces japoneses, en la muy alabada "Cartas desde Iwo Jima". Al parecer, es otra de las grandes de Clint Easwood.

Posdata: Gracias a su comentario en este post he conocido la magnífica crítica de La Bitácora del Tigre. Un buen ejemplo de análisis de una película.

4 comentarios:

  1. Una de las cosas que menos me han gustado de esta película (que no es de las mejores de Clint Eastwood), es la simplificación que el director norteamericano realiza del fenómeno histórico del esfuerzo de guerra.

    Incluso admitiendo que esta clase de simplificaciones son necesarias para llevar a la gran pantalla muchas historias, no creo que la bandera de Suribachi fuera tan esencial como quiere hacernos creer Eastwood.

    Si te interesa otro punto de vista sobre la película, puedes leer la reseña que sobre ella publiqué, el pasado día 10, en mi blog.

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  2. Gracias por tu comentario, Eduardo. Acabo de leer lo que modestamente llamas reseña y me parece magnífica y muy documentada, compartiendo buena parte de lo que allí dices. Y lo mismo todo tu blog, que visitaré con frecuencia.

    Hay mucha simplificación, sí, y lleva demasiado lejos la importancia de una fotografía. Pero es muy sano desmitificar como hace Easwood tanto la guerra de los soldados como la vivida en la retaguardia. Y, si coincidimos en que la participación americana en la guerra fue esencial y definitiva, no es menos cierto que la preocupación por lo que ocurría fuera de su enorme mundo cerrado dejaba de ser unánime y ponderada. Roosevelt tuvo que vencer muchas resistencia para llevar a la guerra a los americanos y mantenerlos en ella.

    Esta dimensión de la película, que, coincido contigo, en de deficiente resolución, a mí me hizo recordar la penúltima novela de Philip Roth, "La conjura contra América", en la que hace muy creíble el triunfo del protofascista y aislacionista Ch. A. Lindbergh.

    Teniendo también presente la manipulación mediática de la actual guerra de Irak, es posible que Eastwood, aunque no milite precisamente en las filas demócratas, no se privara mucho a la hora de denunciar hasta el sarcasmo la manipulación de las conciencias por quienes conducen las guerras.
    Son las razones que me han llevado a recomendar la película a mis alumnos.
    Recibe un cordial saludo

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  3. Efectivamente, a Roosevelt no le fue nada fácil convertirse en el "arsenal de las democracias" y luego convencer a sus paisanos de la necesidad de la guerra. Pero tras el ataque japonés a Pearl Harbour la oposición a su liderazgo fue mucho menor.

    Como veo que te interesa el tema, me permito recomendarte un libro que analiza el peso del esfuerzo bélico norteamericano en el desenlace de la contienda: Por qué ganaron los aliados, de Richard Overy. Tanto este libro como la novela de Philip Roth aparecen reseñados en mi blog.

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  4. Gracias de nuevo, Eduardo, por tus recomendaciones. Seguiré con atención tu interesante blog para aprender un poco más cada vez que lo visite. Es lo mejor de esta actividad bloguera en la que doy mis primeros pasos.
    Saludos.

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