miércoles, 15 de diciembre de 2010

Vieja nueva publicidad: cómo nos venden siempre la misma moto.

A estos pequeños artefactos retóricos que llamamos spots hay que dedicarles tiempo y atención para desmontarlos y transformarlos en conocimiento. De lo contrario podemos llegar a situaciones como la de mi admirada Dolors Reig y su blog El Caparazón, que nos postula el que viene a continuación como:
"Buen ejemplo de los cambios en la publicidad que siempre prescribimos:
Un hombre va a poner una queja por la publicidad de un anuncio (Spot: Muy Bueno!!! )"
Como comprobarás, es más de lo mismo: una utilización de los mecanismos de la retórica para saltarse los de la lógica. Si Ogilvi levantara la cabeza les recordaría, entre otras cosas, que los spots de 2" son más eficaces que los de 30". Este emplea 217 para vender penosamente un chicle. Toda una proeza.

Míralo con atención antes de seguir leyendo:



Veamos ahora las trampas retóricas de una forma ordenada:
  1. Percepción global: Falso envoltorio de frialdad racional. Espacio, luces, tonalidades, actuación, planificación y montaje pausado, todo para tratar de hacer creíble una situación increíble.
  2. El espacio. Debemos comparar lo que aparenta ser con lo que debería ser un espacio tan amplio y vacío. Si nos fijamos en las luces, proyector y pantalla, podemos verlo de otra manera. Pero, si pensamos fríamente en la conducta de los personajes, no nos costará pensar en el diálogo entre una médico psiquiatra y su paciente. Posiblemente sería lo más lógico, pero no es precisamente donde nos quieren llevar estos creativos tan"buenos".
  3. El personaje de él. ¿Es creíble?, ¿es feo y tiene la pinta de ganar el sueldo que dice?. Recordemos: oficinista que gana 600 euros, paga un alquiler y le sobra tiempo para desplazarse a una empresa y hacer una reclamación como ésta.
  4. El personaje de ella. Desprovista al principio de todo aderezo emocional (vestuario, maquillaje, gestualidad) se nos quiere presentar como vehículo de racionalidad y distancia. En realidad es el personaje más auténtico: una especie de "poli bueno" que trata de llevar a su campo al descerebrado "rebelde".
  5. ¿Cómo?: como en un juego de trileros, cambiándole el refresco por un chicle con el mismo argumento. Búsquese, por favor, las diferencias sustanciales entre los dos lemas, "siéntete bien" y "no te cambia la vida, pero te la hace más fácil". Es lo más parecido a una tautología.
  6. RAE: tautología.(Del gr. ταυτολογία). 1. f. Ret. Repetición de un mismo pensamiento expresado de distintas maneras. 2. f. despect. Repetición inútil y viciosa.
  7. Podemos ir más allá y hacer un cambio de lemas: seguramente nos parecerá bastante más falso y denunciable decir de la bebida lo que se dice del chicle.
  8. Conclusión 1: Lo mismo da, sean chicles, bebidas, coches o yogures: la publicidad utiliza siempre la retórica para integrarse en nuestras vidas como algo más de lo que son.
  9. Conclusión 2: Desde el momento en que aplicamos el filtro de la racionalidad al mensaje publicitario, se ponen en evidencia todas sus trampas retóricas y el instalache se viene abajo. En eso consiste la alfabetización audiovisual y mediática
Ya tuvimos ocasión de denunciar este retorcimiento de la retórica vestida de racionalidad en la entrada Don Simón y Granini. La retórica al servicio de la mentira y la manipulación.


ALGUNAS IDEAS PARA TRABAJAR CON LOS ALUMNOS:

1. Desarrollar un diálogo similar cambiando los productos y los lemas. Se puede incluso grabar, dada la facilidad de la representación.

2. Ponernos en el lugar de ambos personales y continuar el diálogo desde lo que les explicamos sobre la retórica y manipulación publicitaria.
- El motivo de mi queja es la mentira del anuncio: "Nueva Gótica. Sabor total, siéntete bien".
- Ya, pero es un anuncio.
- Es un anuncio, pero es mentira (...)
- Ya, pero eso no es un motivo de queja. Yo no le puedo ayudar. La publicidad tiene un lenguaje, que es que es así...
- Entonces,...¿Qué hago?
- Estudiar el lenguaje de la imagen y la manipulación publicitaria.
- ¿Y que voy a aprender con eso?
- (...)


4 comentarios:

  1. Muy buenos tus argumentos. Aunque hay que tener en cuenta que no se trata de un spot publicitario, sino de un corto que se rie sobre el mundo de la publicidad presentando al festival de cortos
    WWW.notodofilmfest.com

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  2. Desconocía el origen, ya indico dónde lo vi. Gracias por la información.

    Desde esa perspectiva, ciertamente, las cosas cambian. Sin embargo, yo no hablaría de risa o parodia, sino de una puesta en escena de la retórica publicitaria para ayudarnos a otros a desvelar racionalmente sus falacias. Eso explicaría mejor su frialdad y distancia.

    Tendremos entonces que darles las gracias a los autores por ofrecernos un material tan bueno para trabajar la publicidad con nuestros alumnos.

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  3. Hombre, para ser un análisis tan sesudo sobre el falso spot, me llama la atención que se te haya escapado el final, donde se ve claramente que es un corto.

    Por supuesto que la publicidad es falaz, sobre todo en productos con beneficios intangibles o inexistente... pero creo que este post le va a la zaga.

    La verdad. Creo que enseñar este análisis a unos alumnos sería confundirles más que iluminarles.

    No se pueden destapar mentiras con otra mentira.

    Saludos

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  4. ¿Destapar mentiras con mentiras?. Nunca ha sido mi estilo, ni aquí ni en mi trabajo profesional. Hace muchos años que aprendí a poner en valor los propios errores e insuficiencias, y este será un buen ejemplo.

    Ni vi los créditos del final, ni caí en la cuenta de que era un corto ajeno al medio que utiliza la retórica verbal de la publicidad para ponerla, precisamente, en evidencia. Caí en la trampa involuntaria que tendió Dolors Reig.

    Y, por lo mismo, me reafirmo en que es un buen material para trabajar la publicidad: Hasta un "sesudo" profesor cayó en sus trampas.

    Saludos y feliz año para todos.

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