No es fácil dar el paso más allá de una enseñanza centrada en las capacidades a otra orientada hacia las compentencias. Lo más fácil y habitual es cubrirse las espaldas añadiendo términos en las programaciones para seguir haciendo lo mismo de siempre. Así nos va.
Los que hemos crecido profesionalmente en un
centro de FP hemos tenido buenas razones para entender lo que es
enseñar y aprender competencias. Tres fotografías de este magnífico repertorio de comienzos del siglo pasado que he visto
aquí gracias a un tweet (siento haber perdido la referencia) me ha suscitado algunas reflexiones:
Clase de Anatomía, 1905Procedencia de las fotos
La exposición del profesor para centrar temas y procedimientos, aportar nueva información y orientar la práctica, es insustituible, siempre resultará indispensable. Desconfío de los que se olvidan de subrayarlo para evitar sospechas. Lo grave y pernicioso es cuando se convierte en la actividad de enseñanza y aprendizaje única o predominante. Basta imaginar a estas señoritas en número de 30 y sentadas en filas para recordar situaciones demasiado habituales.
El
profesor que da clases con la boca cerrada y las manos en los bolsillos como el de la fotografía, mientras actúan los alumnos y se convierten en protagonistas de su aprendizaje, es la que mejor se acom0da al nuevo-viejo rol que se espera del profesor en una educación por competencias, el de
animador y orientador del propio aprendizaje de los alumnos.
Central High School, Escuela de Remo. Washington 1925.
Procedencia de las fotosEn los centros de FP de entonces y en los actuales con ciclos formativos, los profesores de materias "teóricas" (así siguen calificando muchos a las CC.SS., la Lengua y Literatura o la Filosofía) teníamos el argumento de que nuestros contenidos no permitían enseñar directamente competencias. A mí esta fotografía me hace pensar en la obligada tarea que tenemos estos profesores: ser capaces de diseñar situaciones de aprendizaje, tareas próximas o emparentadas con la vida real, que posibiliten la adquisición de las competencias del currículo.
A mí, personalmente, no me resulta fácil ser plenamente coherente con este planteamiento. Por eso ando dándole vueltas a la programación en el frescor de las mañanas de agosto.
Por eso, también, lo publico aquí. La alfabetización audiovisual, mediática y digital que se defiende solo puede pasar por estos planteamientos.
En el wiki
"En la Web 2.0" he abierto una página dedicada a
Trabajar las competencias.